Este proyecto en primera línea de playa en Málaga, habla del encanto del Mediterráneo. En un entorno donde el mar acaricia la costa y el sol se refleja en cada ola, nos sumergimos en un proyecto de interiorismo que captura la esencia del mar y la frescura del ambiente costero.
Nos encargaron la tarea de transformar por completo los baños y la cocina de este hogar, convirtiéndolos en espacios que reflejaran belleza, frescura y sobre todo serenidad ya que era un lugar especial de descanso para nuestros clientes. Inspirados en la paleta de colores azul y blanco, cada detalle fue meticulosamente seleccionado para reflejarlo.
La cocina se convierte en el corazón de la casa, donde convergen la funcionalidad y la elegancia. Optamos por materiales de la más alta calidad, asegurando durabilidad y belleza atemporal. El suelo de terrazo aporta un toque de tradición reinventada, mientras que los azulejos blancos en formato 15×15 cm, con juntas grises, evocan la frescura e luminosidad. Cada elemento fue cuidadosamente seleccionado para crear una atmósfera moderna y acogedora.
Los baños, fueron diseñados como espacios únicos y exclusivos. En uno de ellos, destinado a las pequeñas de la casa, se se buscaba calidez y un toque divertido. Con detalles cuidadosamente elegidos, como la iluminación suave y los toques de madera, creamos un espacio cómodo y acogedor. Mientras tanto, el baño principal, en suite, fue diseñado con un toque mayor de elegancia. La iluminación estratégicamente ubicada y la disposición de las piezas cerámicas crean un ambiente de sofisticación y confort.
En cada rincón de esta vivienda, se respira la brisa del mar y se siente la calidez del sol. Cada detalle, desde los materiales hasta la iluminación, fue cuidadosamente diseñado para capturar la esencia única de la costa del sol. Un proyecto de interiorismo donde la tradición se encuentra con la modernidad.
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